Los fines son solo periodísticos pero como toda información busca un fin. En éste caso político, como es la prevención y el cuidado del medio ambiente, relacionado directamente con la salud de los ciudadanos en general y de Almirante Brown en particular.
Mucho se ha hablado de la contaminación pero existe poca documentación respaldatoria. El aporte gráfico que aquí se vierte tiene el objetivo de contribuir a informar a los particulares para la concientización del peligro mencionado como también a las autoridades de la negligencia o la desidia de ciertos sujetos o empresas que escapan al control oficial y a sus leyes.
Tarde calurosa en el parque industrial (23 de Diciembre del 2008, 16:00 hs.)
Tan pronto comenzamos a recorrer el extenso predio hallamos un arroyo a cielo abierto y a flor de tierra que al parecer es para desagote pluvial. Las aguas transportan sedimentos de dudoso origen que buscan escapar por el descenso de los relieves a campo abierto.
El impresionante colorido contrasta con el agua estancada y los restos, al parecer quimicos, que desprenden un olor putrefacto que es imposible de describir en palabras.
Pero la búsqueda sigue...
El objetivo es conseguir elementos fehacientes de contaminación y muestras de negligencia o desidia en el cuidado del medio ambiente local.
Las pruebas comienzan a aparecer en un basural a cielo abierto.
Escoria de fundición en basural a cielo abierto mezclada con tierra que al parecer se destina al relleno de los caminos.
Basural a cielo abierto con cartel que impide el paso.
Frente a una garita de vigilancia de la empresa Aysa se encuentran desechos de fundición arrojados irresponsablemente al costado del camino. El deterioro del lugar empeora tan pronto nos alejamos de las cuidadas calles del parque industrial.
Si bien la negligencia ya ha sido documentada gráficamente seguimos el camino poco transitado que nos conduce al mayor hallazgo. Frente a las quintas hortícolas encontramos la confirmación de nuestras sospechas.
La irresponsable acción ha depositado, para nuestra sorpresa, en el medio del camino y frente a las plantaciones de hortalizas los desechos de fundición presuntamente nocivos para el ecosistema y el medio ambiente.
restos industriales de escoria de fundición
Plantaciones de lechuga lindantes con el vuelco de escoria de fundición.
Informe acerca de la escoria de fundición y sus efectos en el ecosistema y la salud humana.
Uso del producto:
La escoria se utiliza como material cementoso suplementario para cemento, hormigón y productos de hormigón. También se utiliza para estabilizar suelos y como relleno en asfalto y otros productos de amplia difusión en la construcción. Cabe señalar que no se utiliza como insumo seco mezclado con tierra por el grado de dispersión incontrolada que sufriría.
La composición individual de los componentes peligrosos variará de un tipo de escoria a otro.
Perspectiva general de emergencia:
La escoria es un polvo sólido, inodoro, de color gris/negro o marrón/canela. No es combustible ni explosivo. Una sola exposición por corto tiempo al polvo seco presenta poco o ningún peligro.
Posibles efectos en la salud:
Contacto ocular:
El polvo aéreo puede causar irritación o inflamación inmediata o demorada. El contacto ocular con grandes cantidades de polvo seco o con la escoria húmeda puede causar irritación ocular moderada. Las exposiciones oculares requieren primeros auxilios inmediatos para evitar daños importantes en el ojo.
Contacto dérmico:
La escoria podría causar piel seca, molestias, irritación y dermatitis.
Dermatitis:
La escoria es capaz de causar dermatitis por irritación y alergia. La piel
afectada por dermatitis puede presentar síntomas como enrojecimiento, picazón, erupciones, escamas y agrietamiento.
La dermatitis por irritantes es producto de las propiedades físicas de la escoria, incluidas alcalinidad y abrasión.
La dermatitis por contacto alérgico es producto de la sensibilización al cromo hexavalente (cromato) que se encuentra en la escoria. La reacción puede variar desde una erupción leve hasta úlceras dérmicas intensas. Las personas ya sensibilizadas pueden reaccionar ante el primer contacto con la escoria. Otras pueden presentar dermatitis alérgica tras años de contacto repetido con la escoria.
Inhalación (efectos agudos):
La respiración del polvo puede causar irritación en la nariz, la garganta o los pulmones, e incluso asfixia, según el grado de exposición.
Inhalación (efectos crónicos):
El riesgo de sufrir lesiones depende de la duración y el nivel de exposición.
Silicosis:
Este producto contiene sílice cristalina. La inhalación prolongada o repetida de la sílice cristalina respirable de este producto puede causar silicosis, una enfermedad pulmonar gravemente incapacitante y mortal.
Cancerigenocidad:
La escoria no figura como cancerígeno en las listas de IARC y NTP; no obstante, la escoria contiene vestigios de sílice cristalina y cromo hexavalente, que están clasificados por IARC y NTP como cancerígenos humanos conocidos.
Enfermedad autoinmune:
Algunos estudios muestran que la exposición a sílice cristalina respirable (sin silicosis) o que la enfermedad de silicosis posiblemente estén asociadas con el aumento en la incidencia de varios trastornos autoinmunitarios como esclerodermia (engrosamiento de la piel), lupus eritematoso sistémico, artritis reumatoide y enfermedades que afectan los riñones.
Tuberculosis:
La silicosis aumenta el riesgo de contraer tuberculosis.
Enfermedad renal:
Algunos estudios muestran un aumento en la incidencia de enfermedad renal crónica y de enfermedad renal en etapa avanzada en trabajadores expuestos a sílice cristalina respirable.
Ingestión:
No consta que la ingestión de pequeñas cantidades de escoria sea perjudicial; en grandes cantidades pueden causar problemas en el tracto digestivo.
Afecciones médicas agravadas por la exposición:
Las personas afectadas por enfermedad pulmonar (p. ej., bronquitis, enfisema, enfermedad pulmonar obstructiva crónica, enfermedad pulmonar) o por sensibilidad al cromo hexavalente pueden empeorar como consecuencia de la exposición.
Conclusión.
No está comprobado al parecer que el uso de la escoria metalúrgica para el relleno de los caminos produzca "directamente" alguna afección a la salud siempre que este debidamente elaborada. Si en cambio se ha demostrado que en el caso de poseer sílice cristalina los riesgos de contraer enfermedades graves aumenta notablemente (silicosis).
De más está decir que el volcado a la via pública, entremezcada con la tierra de los caminos vecinos, careciente de todo control toxicológico contrastable y a espaldas de las autoridades, deja la sospecha de que la salud de nuestra población corre muy serio riesgo.
Esta modesta investigación no tiene el objeto escandalizar, sino por el contrario busca colaborar desde una mirada periodistica al beneficio común de todos los integrantes de nuestra comunidad, en particular los directos afectados que sufren palmariamente las acciones negligentes de unos pocos irresponsables que actúan sin pensar en las consecuencias de sus actos o poco le importan ellos.
Seguiremos investigando en cuanto a que a alguna parte de la comunidad, en este caso periodística, le sea útil y divulgue si crea conveniente estos documentos gráficos.Hasta pronto....
Periodismo de Alte. Brown.
De ser posible dejá tu comentario. Gracias.
